Mientras la familia del joven fallecido protestaba en las afueras, en el interior de Tribunales se llevó a cabo la audiencia en la que las partes comenzaron a delinear cómo será el juicio por jurados al que será sometido el policía Pedro Arcángel Bogado. Su abogado sostuvo que actuó en legítima defensa al ser asaltado.
Ante la presencia del juez Facundo Gómez Urso, que deberá presidir el juicio por jurados para determinar cómo se produjo el homicidio de Brandon Romero, este martes se llevó a cabo una audiencia preliminar en la que se exhibió la prueba a presentarse y se explicaron los lineamientos generales que regirán en el proceso.
Mientras la familia del joven fallecido protestaba afuera, en el interior de Tribunales estuvieron los abogados César Sivo y Romina Merino, en representación de su madre, y Martín Bernat y Héctor Robbio por parte del imputado, el policía Pedro Arcángel Bogado. Durante el encuentro, el magistrado dio a conocer algunas premisas que deberán respetarse en el debate, que todavía no tiene fecha.
Fuentes consultadas por LA CAPITAL manifestaron que en la reunión se exhibieron los nombres de quienes se presentarán como testigos, pruebas documentales y peritajes, además de enumerarse las distintas instrucciones suplementarias. Las partes solicitaron que el juicio se extienda por cinco jornadas, y los letrados de Bogado adelantaron que sostendrán que su cliente actuó en legítima defensa al ser asaltado.
En tanto, Gómez Urso instó a los presentes a que, al tratarse de un juicio por jurados, procuren que todos los documentos de importancia sean exhibidos y explicados por peritos específicos para que los ciudadanos que tendrán a su cargo la decisión final sobre el caso comprendan en profundidad los detalles del hecho.
Vale recordar que la muerte de Romero se produjo el 5 de julio de 2020 en la ruta 226, donde Bogado circulaba en su motocicleta a eso de las 6 de la mañana. El policía se dirigía hacia Mar del Plata cuando a pocos metros de la rotonda del Hipódromo tres hombres que circulaban en otro ciclomotor lo sorprendieron, según su versión de los hechos, con fines de robo. La presencia de los sospechosos en las inmediaciones de ese sitio quedó acreditada a través de videos tomados por las cámaras de seguridad del municipio.
De acuerdo a la declaración del policía, logró esquivarlos tras realizar una maniobra de distracción. Sin embargo, en cuestión de segundos vio que el vehículo de los delincuentes volvía a alcanzarlo y decidió detener la marcha del suyo y arrojar las llaves al piso. Entonces, siempre de acuerdo a su versión, observó que uno de los ladrones se había bajado y ahora eran dos los asaltantes.
Conforme pudo saber LA CAPITAL en ese entonces, Bogado mencionó que fue allí que uno de ellos descendió del rodado y le gritó al otro, que estaba armado: “¡Matalo!”. “Vi que el que seguía en la moto tenía un arma y salió un fogonazo. Entonces, saqué la pistola y cuando el que se había bajado se me vino encima disparé”, explicó ante el fiscal Pellegrinelli.
Lo cierto es que Romero sufrió varios balazos y murió, mientras que otro joven que luego sería identificado como Kevin Farías -quien tiene 20 años y múltiples antecedentes delictivos- también resultó herido, pero pudo escaparse del lugar. La detención de Farías (ocurrida sólo días después del hecho), la herida de bala curada en forma casera descubierta entonces en una de sus axilas, y sus múltiples antecedentes penales, hicieron que el fiscal Pellegrinelli creyera en la consistencia de la versión de Bogado.
Hace un año, quienes declararon ante el fiscal fueron los padres de Brandon Romero. En esa oportunidad, dijeron que su hijo era “un chico trabajador” y reclamaron que justicia.